martes, 4 de marzo de 2014

4ª Etapa "Córdoba - Cerro Muriano"

El pasado domingo 23 continuamos nuestro Camino, con la etapa que tuvimos que suspender por el temporal en la fecha planificada. 

Para nuestra opinión fue un gran acierto, ya que ha sido el perfil más duro, pero en cambio se ha convertido en la más bonita de las realizadas, además de hacer un día magnífico.

El cambio fue también en el paisaje, pasando de la Campiña a la Sierra con unos senderos muy gratificantes para el caminar, cruzándonos  con muchos ciclistas que bajaban las pendientes con una "temeridad" asombrosa.

Para destacar la MAGNÍFICA CONVIVENCIA y COMPAÑERISMO del grupo, que kilómetro a kilómetro hace que tengamos ganas de que llegue la próxima salida. 

A la llegada a La Carlota nos esperaba un exquisito Perol de Arroz en el Bar de Vero, a la que agradecemos enormemente su colaboración.

Desde aquí felicitar el comportamiento de todos los caminantes y los Hermanos Martín, que se vuelcan al máximo en cada etapa.

A continuación os dejamos la vivencia de Conchi Rosales.

El Camino de Conchi Rosales 

Cuarta etapa del camino de Santiago.
Hola chicos/as, hoy 23 de Febrero reanudamos una nueva etapa del camino, como todas, ha sido un placer el poder compartir las vivencias y el buen rollo.
Al salir de La Carlota, y a través de los cristales del autobús, nos guía un cielo azul, y una brillante aurora, la luna nos hace guiños convertida en un bonito gajo. El comienzo es en la Mezquita, y bordeando Córdoba sultana y mora, que empieza a despertar, nos vamos adentrando sin querer-queriendo en Sierra Morena hasta llegar a Cerro Muriano, final de nuestra etapa.


El verdor del paraje, el trino de los pajarillos, y el mormullo del Arroyo Pedroche nos va acariciando y adornando el caminar. A medida que vamos avanzando nos enriquecemos con el buen compartir de las vivencias y anécdotas, que nos va madurando y haciendo solera como al buen vino, el que por cierto Carmelo olvidó. Todo ha transcurrido genial, incluso el “repe chito” final. En esta ocasión no nos acompañó protección civil pero sí que llevábamos medico, y afortunadamente no tuvo que prestar su servicio, porque claro el único que se enfermó fue el autobús, y ahí no llegaba. Torres saludó un poquitín el suelo, pero me dijo que no dijera nada, así que chitón………….¡Ah ¡ el arroz riquísimo, hablo por mí, en la próxima nos volvemos a ver, y seguiremos llenando nuestra mochila de emociones.
23-02-2014.C.R.R.


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